A veces , después de haber sobrevivido a una gran tormenta, la calma que tanto estábamos esperando, al fin llega, No antes, no después.,simple y sencillamente en el momento exacto.
Tienen que pasar un sin fin de cosas y situaciones, para finalmente lograr entender eso, y aunque creer en ciertos clichés, cómo : "Las cosas pasan por algo" y "Cuando quieres algo con tanto deseo todo el universo conspira para que lo logres".,pueden resultar abrumadores y poco creíbles.
Hoy me atrevo a decir, que los creo todos.
Por primera vez en mucho tiempo, las cosas han sucedido inesperadamente hermosas, y de repente así cómo si nada, llego alguien que le dio un giro inesperado a toda mi vida, y las cosas que creía conocer de ella.
Créanme cuando les digo que hay que dejar que todo simplemente suceda, no esperen nada, no busquen nada tampoco, todo, todo llega justo, cuando menos te lo esperas.
Y en la vida así cómo en la cocina y los alimentos, todo tiene su determinado tiempo de preparación y cocción.
-Que odias mis silencios. (Pero a veces mi voz te aturde)
-Que me extrañas. (Pero siempre tienes más pretextos para no verme)
-Que me necesitas cerca. (Pero haces lo posible por apartarme)
-Que no quieres que sea sensible. (Pero odias la idea de que pudiera ser ruda)
-Que nunca tengo plan alguno. (Pero cuando lo tengo nunca hay tiempo)
-Que amas las cosas originales. (Pero mi forma de ser te parece extraña)
-Que me dices todo. (Cuando en realidad no dices mucho)
-Que quieres más espacio. (Pero que te busque todo el tiempo de la misma forma)
-Que odias tantas cosas en mi. (Pero no quieres cambiar nada)
-Que odias verme fumar. (Pero que las mujeres que lo hacen tienen cierto atractivo)
-Que no soportas que al caminar suelte tu mano. (Cuando eres tú quién olvida tomar la mía)
A veces dices tanto sin decir nada.
Se esta , y no se esta enamorado, se odia y se ama.
Esta canción siempre me gustó tanto, aunque deprimente la amé y la odié tantas veces. Quizás un poco más de lo primero que de lo segundo, pues tiene un no sé que, que me encanta.
Esperé mucho tiempo para escuchar todo lo que me dijo, pensé que después de tanto tiempo de esperar muchas cosas perderían fuerza , cómo seguir sintiendo esa extraña necesidad de cuidarlo, escucharlo, abrazarlo, de buscar por su bien y su felicidad, pero no fue así...
Para mi él seguía siendo la persona de quién me enamoré la primera vez que lo vi , y los sentimientos tenían igual o mayor fuerza, extrañamente estos nunca desaparecieron, sólo estaban ocultos.
Pensé muchas cosas todo el tiempo que nos quedamos sentados en silencio....
Así que en automático lo dije todo... olvidé el miedo de parecer tonta, cursi , enamorada, olvide todo eso y le dije que desde la primera vez que lo conocí supe que sería muy especial para mi, y después de eso cada día que pasamos juntos yo me enamoraba perdidamente.
Que quizás si el destino existía, lo más probable era que en el nuestro, nosotros no estábamos"destinados a ser ni estar juntos"., pues siempre había algo de por medio, una persona, un sentimiento, una inseguridad, un miedo y quizás la cobardía...
-¿Sabes? Nunca pensé que algún día le diría todo lo que siento por el, jamás pensé que llegaría el momento, pero lo más triste fue pensar que el día en el que yo pudiera decirle todo, el me respondería de la misma forma, que también me diría que sentía lo mismo, y que lo hizo por el mismo tiempo que yo, aunque sea un poquito, pero no fue así...El sólo estaba ahí sentado, en la oscuridad, sin decir nada...
¿Y yo?, aquí contándote una vez más de como el amor que siento por él sigue siento exactamente el mismo, pero que ya no puedo seguir atada a un sentimiento que no es reciproco.
Pobre María, quería decirle muchas cosas, pude decirle ese famoso "te lo dije", "te lo advertí", "tú lo sabías", ó animarla, intentar darle un buen consejo o poder decir algo realmente útil, pero esta vez decidí sólo abrazarla. Se quedo dormida de tanto llorar.
Entonces, recordé una canción que escuchamos hace tiempo, la cual ella dijo odiar tanto, pues le invadía una enorme tristeza de pensar que en algún momento de su vida, pudiera estar en una situación igual o parecida.
Siempre que llega Noviembre me
invade una gran tristeza, siempre recuerdo esos días lluviosos con tanta nostalgia, pues siempre termino recordándolo a él…
Desperté con los ojos vidriosos, hinchados de tanto llorar y ahí no había nada, más que sábanas frías, una
recamara vacía y esa carta en mi mano…
Tome mis cosas, me puse un
suéter, amarre las agujetas de los tenis, camine hacia la puerta y al llegar a ella,
gire lentamente y sabia que estaba mirando por última vez ese lugar, pues jamás
regresaría, nada regresaría…
Camine sola hasta casa, era de
madrugada, el viento jugaba violentamente con mi cabello.
No tenia miedo, ni pensaba en
nada, sólo tenía mucho frío, pues sin
querer darme cuenta había empezado a llover, tan fuerte sin parar…
En algún momento pensé que era
mejor pues mis lágrimas se fundieron con la lluvia y todo parecía normal,
empezaba el movimiento de todos los días en las calles, todo tenía un ligero aire de nostalgia, quizás por
el cielo tan gris que cubría todas las calles.
Para cuando llegue a casa, ya
había un poco de luz, saque la llave de mi bolsa, y todo lo demás lo hice en
automático, no había nadie en casa, así que subí a mi recamara y quise dormir
muchas horas, para que al despertar pudiera engañarme pensando que todo había
sido sólo un sueño.
Cada vez que recuerdo esa escena, aún sin quererlo hacer, recuerdo que todas esas canciones que automáticamente se reproducían, eran tan deprimentes o al menos así parecían. Recuerdo que las odie tanto y hasta estos días evito escucharlas.
