Bruno y Sandra.

Sandra quería platicarme algo y me cito en el café, mientras lo bebíamos a sorbitos, note que ella estaba muy ausente, dejo enfriar su café y solamente asentía ante cualquier comentario.

Le pregunte si le pasaba algo, tardo  en contestar.

Y entonces dijo:

“Hablarle de amor a alguien cuyo corazón esta roto, puede asustar y ser doloroso.”

¿Tú sabías que Bruno empezó a salir con una chica, hace poco?,

Siempre tuve miedo de saber que pasaría si él se interesara enserio por alguien mas, y pues paso, cuando me entere tenía tantas ganas de llorar porque fue hasta ese momento en que pude darme cuenta de todo lo que significa para mi. El otro día me lo encontré en la calle y decidí seguirme derecho, con la mirada en el piso y mis pasos muy rápidos, tenia tantas ganas de hablar con el, pero no pude.

Por comentarios de conocidos, supe entonces que todo iba muy enserio, así que por primera vez en mucho tiempo, me arme de valor, fui hasta su casa, tarde muchos minutos en decidir si tocar el timbre de su casa o no, pero finalmente lo hice, pedí hablar con el, y cuando salió lo abrace con mucha fuerza, no pregunto nada, sólo me invito a pasar, pero le pedí que platicáramos afuera, nos sentamos en la banqueta, y me pregunto si pasaba algo.

Quería salir corriendo, parecía escena de película, me arrepentí de estar ahí, pero no pude más así que le dije todo lo que no pude decirle antes, por miedo.

Pasa que “te amor”,  lo se desde hace mucho, pero tenía miedo y no planeaba decir nada porque este sentimiento de no saber que sientes, de no entender lo que haces y dices me aterra el perderte, y no sé, te lo digo todo porque quiero creer que aún tengo alguna posibilidad.

Intente besarlo, pero me detuvo. 

Me dijo que el sentía lo mismo, pero no podía seguir esperando a que  yo tomara una decisión, que se había cansado de que cada vez que me decía algo sobre nosotros, yo le diera vuelta al tema, y dijera la misma excusa, "tengo miedo" , que había decidido dejar lo nuestro (si se podía decir así), atrás,  y que justo esa tarde le había pedido a la chica que fuera su novia, entonces no había algo mas que hacer. 

Me tomo de la mano, pero se la quite, sin notarlo ya estaba subiendo a mi auto con la cara toda llena de lagrimas, lo vi por el retrovisor y me aguante las ganas de regresar  a abrazarlo.

Yo por supuesto me quede atónita, no encontraba palabras para decirle a Sandra, cuando intentaba formular palabra, me interrumpió y dijo 

“No te cuento esto para que me consueles, pues ya no hay nada que hacer, lo hago porque te aprecio mucho como amiga, y sé que estas en la misma situación, no quieres decir lo que sientes por miedo, no esperes a que te pase lo mismo”.