Café y una cucharada de recuerdos.

¿Por que nos aferramos a viejos recuerdos?

¿Por que surge esa extraña necesidad de conservar el pasado?,  claro esta que aunque no todo sea malo, muchas veces solo se le dan mas vueltas a lo innecesario, y resulta inevitablemente doloroso el proceso de tener que recordar algo que  tiempo atrás ya debería haberse olvidado , para bien o para mal, para poder pasar a otra cosa nueva, a algo que pueda brindarnos nuevas momentos, nuevas cosas que hacer, nuevos pensamientos para que nuevas ideas fluyan, un nuevo comienzo, una… una nueva persona.

Conservar una esencia de lo los momentos hermosos no es malo, pero seguir atormentándote por pensar como hubieran sido las cosas si se hubiera actuado de diferente forma, enferma, enferma y es algo totalmente innecesario, por que ninguno de esos recuerdos cambian, y mucho menos te hacen sentir mejor o diferente.

Quien sabe, al final somos nosotros mismos quienes nos encadenamos a algo de lo que queremos huir para ser libres…